El proyecto Magallanes nació en 2007 en
Redondela (Galicia, España) con el reto de desarrollar una tecnología
capaz de extraer energía a partir de las corrientes de las mareas.
El proyecto está en la fase final de
ensamblaje y construcción de un prototipo a escala real, de 350 Tm de peso. Las
pruebas de mar se inician a finales de 2015 o principios de 2016.
Tras una fase de investigación y
desarrollo, Magallanes construyó y probó en 2014 un primer modelo a escala
1:10, que concluyó con éxito los ensayos oficiales en el Centro Europeo de
Energías Marinas (EMEC, en sus siglas en inglés) en las Islas Orcadas
(Escocia).
El proyecto se basa en conseguir el método
más eficiente y rentable para obtener energía de las mareas: una instalación
robusta y sencilla, capaz de producir en cualquier área del mundo y con el más
fácil sistema de mantenimiento.